Cuando la política y la religión se mezclan

**Juan Etazra** Sáb Feb 19, 2011 4:34 am

Es muy común aquel dicho que recomienda: “Nunca hables de religión o de política”, pero vamos a hablar de las dos cosas al mismo tiempo.

Siempre me quedo perplejo ante la resistencia de algunos ateos y creyentes moderados de reconocer los peligros de la religión, y a pesar de que no creo que sean la causa de todos los males, si juegan un papel importante en nuestras sociedades. “¿Qué tiene de malo la religión? Déjalos creer lo que quieran” me dicen, y no es el que crean en sí el problema, sino lo retrógrado de las enseñanzas religiosas, los libros sagrados exudan veneno.

Cuando la política y la religión se mezclan Fanatismo

Ahora bien, el creyente moderado jamás se toma la molestia de conocer su propia religión por lo que podemos considerarlos inofensivos, pero los fundamentalistas la conocen muy bien, y saben que cualquier forma de represión y prejuicio puede ser justificada con el uso de ciertos versos o capítulos de sus libros sagrados.

“Naaahhhh, esa gente es rechazada por la mayoría, son considerados fanáticos y nadie los toma en serio”, es la respuesta que me podrían dar, sin embargo a través de la historia se puede demostrar que las ideas religiosas son peligrosas si se les toma de manera literal o con seriedad. Como por ejemplo:

Cuando la política y la religión se mezclan Brujasleviticodeu

La Biblia reconoce la existencia de brujas y hechiceros, y además ordena que se les elimine, ya que Dios los aborrece, bajo este pretexto se dieron las quemas de brujas en Europa en los años 1450 a 1750 y en Salem, EUA en 1692.

Cuando la política y la religión se mezclan Esclavitudbiblia

Uno de los motivos por los cuales la guerra de secesión de EUA se llevó a cabo fue para abolir la esclavitud, sin embargo los dueños de esclavos trataron de defenderse usando pasajes de la Biblia, ya que esta apoya la esclavitud y da instrucciones muy precisas de cómo tratar esclavos, venderlos o comprarlos. Afortunadamente el presidente Lincoln terminó por abolirla en 1865.

“Vamos, vamos” me dirán algunos, “todo eso es historia antigua, ya no es válido en las culturas modernas, nomás falta que hables de las cruzadas”.

Bien, digamos que ya no tiene importancia en nuestros tiempos, sin embargo en países de medio oriente y África siguen basando sus leyes en enseñanzas religiosas, algunos países como Arabia Saudita son teocracias bien conocidas, y en dichos países se puede ejecutar a una persona por ser gay, por renunciar a la religión o simplemente por blasfemar, y todas estas leyes están basadas en libros sagrados. Hace poco estos países lograron que la ONU dejara de considerar este tipo de ejecuciones como un asunto de derechos humanos, afortunadamente dicha modificación en las políticas de la ONU no duró mucho tiempo.

Podría alguien argumentar: “Pero no compares países Árabes y Africanos con países Europeos y Americanos, aquí somos más tolerantes y civilizados”.

Cuando la política y la religión se mezclan Gay_Pride_Parade_NYCR108

¿No es lo suficientemente cerca? Bien, ¿entonces qué me pueden decir acerca de la prohibición del matrimonio gay o el derecho de los homosexuales de adoptar hijos? No existen motivos seculares para estas prohibiciones, no hay estudios científicos que las respalden, en lo único que están basados los votos en contra de los derechos básicos de los homosexuales es en la religión.

En Irlanda la presión también es alta para quienes no pertenecen a su secta cristiana, ya sea protestante o católica, es común que hayan pleitos callejeros en los que no faltan los heridos o muertos, y por si fuera poco se aprobó una ley en el 2010, en la cual se castiga con 25 mil euros a las personas que se atrevan a blasfemar o insultar a la religión.

En ocasiones los radicales religiosos se filtran a las esferas de la política y promueven sus intolerantes ideas por medio de leyes, disfrazándolas de beneficios económicos para el país, como ejemplo pongo la ley HR3, que fue recientemente propuesta en el congreso de estados unidos, dicha ley, de aprobarse, prohíbe el uso de recursos del estado para la realización de abortos en casos de violación, los diseñadores de la propuesta quieren redefinir el concepto de violación, ya que según ellos, para que una mujer pueda abortar tiene que haber resistido la violación, dejando fuera a mujeres que hayan sido drogadas, engañadas, que hayan estado inconscientes o que hayan sido chantajeadas al momento de realizar la violación sexual… curiosamente la definición de violación que proponen es muy parecida en su fundamento a la ley del Deuteronomio, donde se castiga con la muerte a la mujer que no grite al momento de ser violada, es decir, prácticamente culpan a la victima de no defenderse.

Cuando la política y la religión se mezclan Deuteroylaviolacion

Dicha ley también permite que los hospitales puedan negar el aborto incluso en caso de que la vida de la mujer esté en peligro, lo cual demuestra que los intereses de estos políticos no es la vida del niño, ni de la mujer, sino forzar su propia moral a los demás.

“Pero yo no soy homosexual, mujer, ni pertenezco a ninguna minoría, esto no me afecta”.Por supuesto que si no perteneces a ninguna minoría lo más probable es que de momento no te veas afectado por el hecho de que la religión se vea inmiscuida en la política y esté tratando de hacer leyes en contra de todo lo que no consideren “correcto”.

También es posible que pienses que nada de esto tiene que ver contigo, ya que eres un creyente moderado, pero el hecho de que no digas nada, y dejes que los líderes religiosos promuevan leyes contra los derechos humanos, el hecho de que les sigas dando tu dinero a las iglesias domingo a domingo te convierte en cómplice de los fanáticos religiosos.

Cuando la política y la religión se mezclan Separacion-iglesiaestado

Si vives en un país relativamente secular, como México y piensas que todo esto está muy lejos de hacerse realidad, piénsalo dos veces, ya que un país tan poderoso como EUA es altamente religioso y tan ignorante como cualquier otro país con educación deficiente, y su influencia sobre el resto de los países latinoamericanos es innegable. Por lo tanto, si no nos quejamos, reclamamos y defendemos la separación de la iglesia y del estado, entonces puede ser que llegue un momento en que se promuevan leyes que te digan que debes creer y que debes pensar, entonces sí que te verás afectado. Tal vez no sea una posibilidad inminente, pero sigue siendo una posibilidad, no lo olvides.

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